LA GLORIOSA BATALLA DE AYACUCHO
Un personaje fundamental fue Antonio José de
Sucre, quien lidero las tropas nacionales por encargo de Simón Bolívar.
Se trata de un momento determinante en el
camino hacia la independencia.
ANTECEDENTES:
El 6 de agosto del año 1824, la batalla de Junín
había sido un detonante en las diferencias entre peruanos y españoles.
El triunfo lo permitió a los comandados por
el general Simón Bolívar obtener confianza en su lucha para alcanzar la
independencia.
Por ello, se
dirigieron a lima en busca de apoyo financiero. Y fueron reforzados con
hombres procedentes de Colombia.
Posterior mente, Bolívar envía a Antonio José
de Sucre a la cabeza de las tropas peruanas en Ayacucho.
LA CAMPAÑA:
El ejército de José de Sucre contaba con
5.600 hombres, una cifra muy inferior a los soldados del virrey La Serna
(9.500).
Al amanecer del nueve de diciembre de 1924,
ambos ejércitos ultimaron detalles para la batalla. Sucre dijo: “de los
esfuerzos de hoy depende la suerte de América de Sur”.
A la una de la tarde, la victoria era
peruana. Los realistas sufrieron una perdida de 1.400 hombres.
LA CAPITULACION:
Luego de ganar la batalla, en un documento
firmado por José Antonio de Sucre y José Canterac se establecen los siguientes
acuerdos.
1.- Que el territorio bajo control español sea
entregado al ejército único libertador peruano.
2.- los militares españoles pudieron regresar con
gastos pagado por el estado peruano.
3.- que los españoles que permanecieran en el
Perú fueran considerados peruanos y los militares conservaran sus grados en
el ejército libertador.
4.- Se
reconoció la deuda con España. Con la firma de este documento se dio por
terminado el mandato español en el Perú, tras mas de tres siglos de dominación
de la corona extranjera en nuestro territorio.