RESUMEN:
Argumento del libro "La ciudad y los Perros".
Comienza
con el robo de un examen de química el cual va a ser tomado días después, este
es extraído por el cadete Cava, alumno venido de la sierra quien es vigoroso y
osado. Este fue ordenado por el círculo, agrupación que impone el lema y
desorden entre los internos del Colegio Militar Leoncio Prado y del cual es
líder.
Se
llega a descubrir este delito por que Cava deja un vidrio roto al cometer su
fechoría, entonces las autoridades del plantel toman cartas en el asunto
consignado a toda la sección en todos estos sucesos, resultando afectados
injustamente culpables y no culpables y entre ellos un muchacho (Ricardo Arana)
el cual es conocido como el esclavo y quien denuncia Cava el cual es degradado
y expulsado por las autoridades del plantel.
El
Colegio Militar Leoncio Prado, como parte de entrenamiento de sus cadetes
realiza maniobras, en estas prácticas militares Ricardo Arana recibe un balazo
en la cabeza causándole la muerte. Ahora todos desconfían del Jaguar puesto que
Arana fue el autor indirecto de la expulsión de Cava y se piensa que fue una
venganza llevada a cabo en un a situación propicia debido a la confusión
reinante en estas actividades.
Al
saber esto las autoridades del colegio se estremecerán pensando en las
perjudiciales consecuencias del escándalo. Establecen como versión oficial que
la muerte de Ricardo Arana fue accidental.
Entre
todos los internos hay uno llamado Alberto “el poeta”, quien es hipócrita y se
desenvuelve como amigo del esclavo; este en un momento rompe con los pactos que
los une con el círculo y a la vez culpa del crimen al jaguar ante el teniente
gamboa, el cual es conocido por ser n hombre disciplinado y recto.
A la
larga todos se ven envuelto s en actos de silencio, por lo tanto, el caso se da
por cerrado y la investigación no se reabre.
A
Alberto se le impide seguir adelante con sus investigaciones y ni el teniente
gamboa puede hacer nada, incluso este es ascendido olvidando así el apoyo
inicial que le dio al poeta. Las autoridades del plantel para callar al poeta
lo amenazan con mostrar a sus padres las novelitas pornográficas que este
escribía y que a la vez eran vendidas por sus compañeros de aula.
El poeta
se quedo callado y así se evito aclarar la muerte del cadete Ricardo Arana “el
esclavo”.