Argumento del libro "La Ciudad del Sol" de Estanislao
del Campo.
Se
publico en el año de 1623 y en 1904 en Italia. Se trata de un dialogo en el
cual intervienen como interlocutores una almirante genovés que ha dado la
vuelta a la tierra y el gran maestre de los hospitalarios, huésped suyo.
El
gran maestre inicia solicitando al almirante que le haga un recuento de lo
acaecido en su navegación; este refiere lo sucedido en la isla de Taprobana
(Ceilán), la manera como de repente se4 ve rodeado por una gran cantidad de
hombres y mujeres armados que lo conducen a la ciudad del sol.
En
segunda cuenta la forma como se ha construido esa ciudad, erigida en una colina
dividida en siete circuitos y recintos, cada uno de los cuales lleva el nombre
de un planeta.
Existe
un sumo gobernante de la ciudad, que es un sacerdote llamado Hoh, con autoridad
absoluta, arbitro en lo temporal y en lo espiritual lo asisten constantemente
otros jefes llamados Pon, Sir y Mor, nombres que equivalen a Potencia,
Sabiduría y Amor.
Este
triunviro no reconoce ningún superior en los asuntos militares, exacto a Hoh.
La potencia tiene el gobierno de todo lo que atañe a la paz y a la guerra, la
sabiduría dirige las artes y las ciencias cada una, de ellas con sus
respectivos magistrados. El Amor está encargado especialmente de la generación;
su principal finalidad es que la unión amorosa ocurra entre los individuos de
tal manera organizados que produzcan una excelente prole.
También
está subordinada a Amor la educación de los niños, las siembras, cosechas y
recolección de los frutos.
En
la ciudad del sol, ninguna mujer puede tener relaciones sexuales antes de los
diecinueve años, los hombres deben de haber cumplido veinte o más, si son de
contextura débil.
Solo
a algunos les está permitido el coito antes de esta edad, con mujeres estériles
o grávidas; este permiso se otorga por temor a que la represión excesiva los
lleve a prácticas no naturales. No conocen los celos por que el amor se
considera como una obra religiosa.
El
almirante relata a su huésped todo lo relacionado con el arte de la guerra
entre los Salárianos, la disposición de sus ejércitos, las armas que emplean y
los premios y honores a los soldados distinguidos. Luego le refiere todo lo
correspondiente al trabajo; ahí la agricultura es extraordinariamente
apreciada; se estudian los vientos y las estrellas ante de sembrar; cada
especie animales halla bajo un signo zodiacal.
En
la ciudad del sol no existen tampoco las enfermedades, son muy raras en
animales y hombres, llegando estos a vivir hasta doscientos años.
En
cuanto a la justicia, cada individuo es juzgado por el Sino Maestro de su
propia arte, quien condena al destierro, al deshonor u ordena los castigos
corporales o priva a los culpables del derecho de asistir al comedor caminal o
al templo.
La
religión permite al que va a ser ejecutado exponer ante el pueblo reunido las
razones por las cuales no debiera morir y le obliga a revelar las culpas de los
demás.
Viene
después el relato de todo cuanto tiene que ver con cultos, sacrificios y
creencias. Loa Triunviros deben dar ejemplos de santidad, todos los principales
magistrados son sacerdotes, descubren sus propias culpas y las de los demás al
mismo Hoh, quien aplica los remedios oportunas, ofrece sacrificios y plegarias
a Dios y confiesa públicamente desde el altar las culpas de todo el pueblo.
Confiesa
que en el mundo existe mucha iniquidad y que los hombres no se hallan
gobernados por razones elevadas; por ello se ha producido un gran desorden en
las cosas humanas.